LITERATURA

Presentarán la antología Vamos al circo. Minificción hispanoamericana

Boletín No. 300 - 13 de marzo de 2017

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  • El miércoles 15 de marzo a las 19:00 en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes
     
  • Conversarán Agustín Monsreal, Fernando Sánchez Clelo, Marcial Fernández, Adriana Azucena Rodríguez y Gloria Ramírez
     
  • Solamente sabemos si un cuento es bueno si le procura un placer casi instantáneo a quien lo lee: Marcial Fernández

Editada por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, la compilación Vamos al circo. Minificción hispanoamericana reúne más de 120 textos de narradores de Argentina, Colombia, España, Estados Unidos, Perú, Venezuela y México. En la presentación de este volumen, los antologadores, Agustín Monsreal y Fernando Sánchez Clelo, conversarán con Marcial Fernández y Adriana Azucena Rodríguez, bajo la moderación de Gloria Ramírez, el miércoles 15 de marzo a las 19:00 en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes.

Entrevistado por la Coordinación Nacional de Literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes, Marcial Fernández destacó a los autores que contiene esta antología, entre ellos la argentina Ana María Shua, quien recientemente obtuvo el Premio Iberoamericano de Minificción Juan José Arreola, además de Diana Grijalva, Adriana Azucena Rodríguez, Eréndira Herrera y Armando Alanís, de México.

“Lo interesante de la minificción es que muy rápido, en dos, tres o cuatro líneas, el escritor provoca en los lectores el mismo efecto que, por ejemplo, un cuento largo o incluso una novela. La minificción tiene eso que se llama la vuelta de tuerca o la malicia literaria para que, en dos o tres palabras, cree una sensación de sorpresa, de asombro o, si fuéramos creyentes de alguna religión, de algún milagro.

“Mueve las mismas fibras, los mismos hilos que el pensamiento mágico, solo que, en lugar de inventar dioses, crea juegos de palabras, de anécdotas, imágenes o personajes que logran conmover a los lectores y los convierten en aliados”, comentó Marcial Fernández.

El escritor y editor mexicano resaltó la polisemia como una de las cualidades importantes del género de la minificción, porque permite que existan muchas interpretaciones. “Solamente sabemos si un cuento es bueno si le procura un placer casi instantáneo a quien lo lee.

“Estas historias son una manera de acercarnos al circo y de algún modo volver a disfrutar a los animales, a los personajes de este tipo de espectáculos, y que de alguna manera convivan con nosotros, con nuestras acciones y con todo lo que pensamos o hacemos de manera cotidiana. Los personajes de este libro no son otra cosa que nuestra propia humanidad llevada a la caricatura o a un extremo donde puede ser más visible para los demás”, concluyó.

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