MÚSICA

Santiago Piñeirúa y Mauricio Náder demostrarán su virtuosismo en un concierto de piano a cuatro manos

Boletín No. 208 - 14 de febrero de 2019
  • Se presentarán el 16, 17 y 21 de febrero en la Sala Manuel M. Ponce, el Munal y el Museo Iconográfico del Quijote, respectivamente
  • Interpretarán piezas de Mozart, Brahms, Grieg, Saint-Saëns y Dukas

Cuando un pianista toca en un solo instrumento, tiene acceso a todo el registro, por lo que al tocar en dos pianos, se pueden duplicar las mismas notas y la sonoridad es diferente; pero al estar dos personas en un mismo instrumento, la textura de la música es muy densa al estar cuatro manos en un mismo teclado.

Así lo señaló el pianista Santiago Piñeirúa al explicar la diferencia entre tocar en dos pianos y tocar en uno a cuatro manos, tal como sucederá en  los tres conciertos organizados por la Coordinación Nacional de Música y Ópera del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, en los que estará acompañado en el instrumento del pianista Mauricio Náder.

Tendrán lugar el sábado 16 de febrero a las 17:00 en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, el domingo 17 a las 11:30 en el Salón de Recepciones del Museo Nacional de Arte (Munal) y el jueves 21 a las 20:00 en el Museo Iconográfico del Quijote, en Guanajuato.

Sobre la complejidad de interpretación en un mismo piano, Piñeirúa agregó que el manejo del instrumento también difiere, ya que un pianista puede acceder a todo el teclado cuando está solo, desde el registro más alto al más bajo. En cuatro manos esto no se puede hacer y el uso del pedal se limita a un pianista, lo que provoca sonoridades diferentes.

De 1993 a 2002, Piñeirúa estudió con Mauricio Náder, por lo que la relación alumno-docente ha dado paso a una relación de colegas. “Él fue mi maestro. Nos conocemos muy bien. El historial que tenemos en el piano ha permitido que toquemos juntos en varias ocasiones”, afirmó Piñeirúa.

El pianista con estudios de licenciatura en la Manhattan School of Music de Nueva York indicó que iniciarán el programa con la Sonata KV 521 de Wolfgang Amadeus Mozart, pionero en el género de cuatro manos.

Posteriormente, continuarán con las Danzas húngaras, números 1, 2 y 5 —en total son 21— de Johannes Brahms, las cuales generalmente son orquestadas, pero los Concertistas de Bellas Artes interpretarán la versión para piano a cuatro manos que realizó el propio compositor.

Música muy conocida es la suite Peer Gynt núm. 1, op. 46, de la que se escucharán sus cuatro movimientos: La mañanaLa muerte de AaseLa danza de Anitra y En la gruta del rey de la montaña. Esta obra de Edvard Grieg fue creada para acompañar un texto de Henrik Ibsen (autor de Casa de muñecasUn enemigo del pueblo, entre otras), Peer Gynt.

Danza macabra op. 40 de Camille Saint-Saëns, en su versión para cuatro manos, será la siguiente pieza a interpretar, para finalizar con El aprendiz de brujo de Paul Dukas, obra muy conocida, con muchísimo lenguaje orquestal del siglo XX, aunque mantiene lenguaje tonal, es muy lucidora y virtuosa, aseguró Piñeirúa.

Santiago Piñeirúa se ha presentado en Estados Unidos, España, Francia, Inglaterra, Italia, Austria, República Checa, Hungría, Chile, Uruguay, Argentina, Argelia y Túnez. Ha sido becado en varias ocasiones por el Fonca y ganó la beca de Creadores Escénicos 2008-2009. Ganó el Premio Nacional de la Juventud 2011 y ha sido galardonado en diversos concursos nacionales e internacionales.

Mauricio Náder, egresado del Conservatorio Nacional de Música, debutó a los 19 años en el Palacio de Bellas Artes como solista de la Orquesta Sinfónica Nacional. Ha pisado escenarios de México, Estados Unidos, Canadá, Alemania, Bulgaria, España, Francia, Italia, Noruega, Portugal, Belice, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Perú, Puerto Rico, El Salvador, China, Líbano y Pakistán.

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