Tomás Marín y José Alfonso Álvarez harán un recorrido por lo mejor del repertorio para violín y piano

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• El jueves 23 de noviembre a las 18:00 en la Escuela Judicial del Estado de México; entrada libre

El violinista Tomás Marín y el pianista José Alfonso Álvarez ofrecerán un concierto el jueves 23 de noviembre a las 18:00 en la Escuela Judicial del Estado de México, en Toluca, en el que interpretarán piezas de los compositores fundamentales que escribieron para esta dotación, desde Georg Friedrich Händel hasta Enrique Espín Yépez. El acceso a esta actividad del ciclo Bellas Artes a todas partes será gratuito.

“Este programa concentra mi admiración por la cultura de los siglos XVIII y XIX, pasando por una compositora que pocas veces se toca en nuestro país: Maria Theresia von Paradis, hasta un autor latinoamericano que conocí durante mi carrera: Enrique Espín Yépez”, refiere en entrevista Tomás Marín.

“Tengo una gran admiración por la cultura del siglo XVIII. Bach todavía estaba produciendo; Händel y Mozart también. Estas tres figuras trabajaron durante esa centuria en la que sucedieron muchas revoluciones en diferentes órdenes de la vida y la cultura. Para el violín fue un siglo muy brillante, pues muchos artistas compusieron para el instrumento a tal grado que se alcanzó la cúspide de su desarrollo técnico y se introdujeron dificultades mayores.

“El programa abarca un rango muy amplio de épocas y estilos. Yo creo que no estorba la variedad de las obras para que el público disfrute un concierto, pues si algo tiene la música es que se actualiza cada vez que se interpreta, aunque siempre me preocupo porque dialoguen las piezas. Como intérprete mi interés es hacer latir el corazón que fue vertido en esas obras, aunque hayan sido escritas hace siglos y en ambientes distintos.

“Para un concertista, estudiar y aprender técnicamente es requisito obligado, pero un intérprete puede llegar a establecer una conexión con la obra hasta apropiarla. Con el Dúo en la mayor de Schubert tengo esa conexión, ya que la he tocado desde mis días de estudiante. Cuando estuve en Austria, de donde es el compositor, pude sentir cómo el país lo vivía. Hay muchos rastros de él que pude percibir, y justo, cada vez que toco sus obras, me conecto con esas experiencias, con esa parte de mí. Por eso es un autor muy especial.

“Este dúo tiene un clasicismo fundamental y, al mismo tiempo, hizo muchas innovaciones. Su compositor, quien vivió el tránsito del clasicismo al romanticismo, fue un genio muy versátil, y esta es una de sus obras mayores”, detalló el concertista.

Además de la Sonata núm. 6 en mi mayor de Händel, Marín y Álvarez interpretarán a Paradis, compositora que se toca muy poco en nuestro país: “Siciliana es una pieza del siglo XVIII en la cual su autora impregnó una gran sensibilidad. Conocí su obra cuando estaba en Francia y la traje entre mis recuerdos, pues allá se toca mucho. Es una composición antigua, muy inspirada, que se queda en el corazón”.

De Jean Sibelius ofrecerán Nocturno. “En esta pieza se proyecta un Sibelius de una gran ternura y de un estado contemplativo, una inspiración que quizá tenga que ver con la naturaleza de la geografía nórdica”.

Acerca del ecuatoriano Espín Yépez, señala Marín: “Fue un violinista y compositor que se formó bajo la tutela del también violinista polaco-mexicano Henryk Szeryng. Incluso lo nombró su heredero. Espín Yépez tomó como base para algunas de sus obras un género muy popular en América Central llamado pasillo y lo trasladó a la música académica. Tocaremos uno de esos pasillos, junto con su Danza ecuatoriana. Son obras en las que se siente el baile”.

El programa cerrará con “una obra mayor de Piotr Ilich Chaikovski: Meditación. De las piezas que escribió para violín, quizá esta sea la más profunda. Tiene una introducción de piano solo que prepara la entrada del violín. La melodía es profundísima. Durante un viaje a Rusia llegué a escuchar muchas veces que esta obra era suficiente para que Chaikovski pasara a la historia como un gran compositor”.

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