El pianista venezolano Kristhyan Benítez será solista invitado de la Orquesta de Cámara de Bellas Artes

.

• Interpretará obras de Liszt y Bach, el jueves 23 de febrero en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes y el domingo 26 en el Conservatorio Nacional de Música

Considerado uno de los líderes del movimiento musical de Venezuela en la actualidad, el pianista Kristhyan Benítez participará como solista invitado con la Orquesta de Cámara de Bellas Artes (OCBA), bajo la dirección de su titular, José Luis Castillo, el jueves 23 de febrero a las 20:00 en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes y el domingo 26 al mediodía en el Conservatorio Nacional de Música.

Benítez se ha presentado con las orquestas sinfónicas de Berlín, San Francisco, Miami, Palm Beach y Nacional de Cuba, entre otras, y ha sido dirigido por maestros como Claudio Abbado, Gustavo Dudamel, Piero Gamba, James Orent, Ramón Tebar, Giancarlo Guerrero, Eduardo Marturet, Carlos Riazuelo, Felipe Izcaray, Alfredo Rugeles, Benjamin Zander, Patrick Lange, Christian Vásquez y Diego Matheuz.

“En los años ochenta, las grades salas de concierto de Latinoamérica eran el Teatro Colón de Buenos Aires, el Teatro Teresa Carreño en Caracas y el Palacio de Bellas Artes de México. Son salas que representan para mí la grandiosidad; hay muchas otras espectaculares en el mundo, pero el Palacio de Bellas Artes representa una historia, un arraigo cultural muy profundo. Estoy honradísimo de tocar allí”, comentó en entrevista Kristhyan Benítez.

Después de presentarse en 2016 con la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma de Nuevo León, José Luis Castillo lo invitó a participar con la OCBA. Para esta ocasión eligieron Malédiction de Franz Liszt, una obra que se interpreta poco y es bastante importante dentro de la historia del compositor húngaro.

Agregó que Liszt fue de los autores más revolucionarios de su época y que esta obra en particular la escribió para cuerdas y piano. “Estaba tratando de experimentar qué sonido podía producir una orquesta solamente de cuerdas. Es una obra muy compleja.

“Se llama Malédiction porque, en el manuscrito, el primer acorde es para el piano solo y suena como una maldición. Él tenía esa obsesión con las artes oscuras, Mefisto y esos sonidos y acordes que estaban prohibidos. Hizo a la orquesta y al solista sonar de una manera que no era tan orgánica en esa época, con diferentes tonalidades. El cromatismo modular que utilizó es bastante vanguardista. Siempre fue un compositor muy avanzado”.

La otra obra que interpretará es el Concierto en fa menor de Johann Sebastian Bach. “No podía faltar una pieza del padre de la música de concierto”. Las obras de Bach y Liszt representan dos temperamentos distintos, pero lo que las une es su estructura, ya que ambas obras fueron concebidas para teclado y orquesta, dijo Benítez, quien ha obtenido reconocimientos en Venezuela, Argentina, Grecia, México, Cuba, Austria, Francia, Bélgica, Alemania y Estados Unidos.

“Cuando estoy en México, me siento muy en casa. Culturalmente, Venezuela y México comparten cosas muy parecidas, muchos valores y principios. Poder traer música a este gran país me llena de muchísimo orgullo, sobre todo como latinoamericano, porque estamos todos unidos como una gran nación. Latinoamérica es un todo, y todos debemos de contribuir de alguna manera a la evolución y al desenvolvimiento de la cultura de nuestra región en el mundo”, finalizó.

El programa que interpretará la OCBA lo completan Por el globo, Europa y Hungría de Georg Philipp Telemann, en el marco del 250º aniversario luctuoso del compositor alemán; Angelus de Liszt, y Danzas de Transilvania y Danzas rumanas de Béla Bartók.

---000---